La noche se apodera lentamente
Del espacio en que hace un rato gravitamos.
Tu cabello enmarañado el viento mece.
Brillan los ojos de los dos magnetizados
Apagando los temores del opuesto.
La penumbra de a poco va creciendo,
Transportando ese ligero vaivén,
Desde las piernas, hasta nuestros vientres
Corren líquidos veloces por mi cuerpo
estallando en sudores violentos.
Y un espasmo vuelve a recorrernos
Al momento de besar nuestro labios.
Y le arranco al corazón ésta piel,
Para dártelo libre de pecado,
Pues una vez que ruede a tu costado,
Mi cuerpo no sabrá que hacer con él.
Pues las manos tendrán nuevas tareas
En las cuales invertir sus esmeros.
Y tu boca no ha de hablar, por lo menos,
Mientras la tengas invadida por mis besos.
3 comentarios:
es la noche la que teje posibilidades y en penumbras con silencios concertados o miradas cómplices uno del otro se protege bajo esa coraza de besos
como bazookas del destino sin fuegos de artificio.
ESTO ES SIMPLEMENTE HERMOSO .
TE MANDO UN GARN BARAZO .
Kiddo, este
"Y le arranco al corazón ésta piel,
Para dártelo libre de pecado,
Pues una vez que ruede a tu costado,
Mi cuerpo no sabrá que hacer con él."
es maravilla de poesía, entrega total, una imagen de autosacrificio, así es el amor, el que vale el que entrega todo, corazón que mueve sol y luna, por eso hay días y noches y es eterno.
Regreso a mi balsa con la imagen de ese corazón que mueve el infinito. Abrazos de este naufragante.
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