Empezar por imaginarte,
Por traerte a la mente sigilosa.
Alimentar los recuerdos,
Inventando las historias;
De lo que pudo haber sido.
Tirar de la cuerda infinita,
De los anhelos escondidos,
De los dolores imperfectos,
De los saltos de secuencia,
De tu olvido a tu presencia.
Remembrar cada latido,
Cada abrazo y su suspiro,
Relegando la impotencia,
Sublevando la experiencia
De los besos recibidos.
Abrazarme a los conjuros
Imposibles e insipientes
Que prometan devolverte.
Ignorar los duros hechos,
Rasguñar cada resquicio,
Apuntalar el absurdo
Renovando los deseos.
Sembrando nueva esperanza,
E intentándolo de nuevo.
Elevarte a mis Olimpos
Ignorando la cordura.
Imponiendo a mi mentira
Sobre toda la razón.
Para que luego desciendas
De las nubes de mi ensueño.
Recibiendo por respuesta
Los golpes de tus desdeños.
Amarrarme las costillas
Suplicándole a las cuerdas
Que refrenen el latido
De mi voraz corazón.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario